Tanto los simposios como los seminarios son formatos populares para el intercambio de conocimientos y el desarrollo profesional, pero difieren en su propósito, estructura y alcance. Comprender las diferencias entre ambos tipos te ayudará a decidir cuál es el más adecuado para las necesidades de tu empresa o de la organización para la que trabaja.

En esta entrada del blog hablaremos de ambas, expondremos sus principales diferencias y hablaremos de las distintas herramientas que pueden resultarte útiles si estás planificando alguna de ellas.

¿Qué es un simposio?

Los simposios son encuentros organizados, a menudo a gran escala, que reúnen a expertos, investigadores, practicantes y profesionales. El objetivo de un simposio es debatir e intercambiar conocimientos, resultados de investigaciones y reflexiones sobre un tema concreto.

El tema central o de debate siempre está bien centrado. Por ejemplo, una empresa de marketing puede celebrar un simposio sobre la experiencia del cliente y el mapeo de viajes, o las tendencias emergentes. En cambio, una organización de comercio electrónico podría centrar un simposio en la expansión transfronteriza o la logística y el cumplimiento.

Formato del simposio

Los simposios pueden resultar muy atractivos debido a los diferentes segmentos que componen la reunión en su conjunto. No todos los simposios son iguales, pero sí los hay típicos:

• Presentaciones o conferencias
• Mesas redondas
• Reuniones intermedias
• Grupos de investigación compartida
• Oportunidades de establecer contactos
• Participación del público

Con tantas cosas en las que los asistentes pueden participar, los simposios pueden variar en duración, desde un solo día hasta varios días, dependiendo del alcance y la escala de lo que haya que tratar. Podrán programarse múltiples sesiones y temas paralelos para dar cabida a una amplia gama de presentaciones y temas.

Las mejores herramientas para celebrar un simposio

No hace falta decir que si vas a participar en un simposio, el equipo de presentación y audio es fundamental. Sin embargo, no olvides los siguientes elementos esenciales:

• Material para tomar notas: proporcionar bolígrafos y blocs de notas a los asistentes fomenta la participación activa y permite a los participantes anotar información clave.
• Etiquetas identificativas e insignias: facilitan el establecimiento de contactos, permiten a los participantes dirigirse a los demás por su nombre y mejoran el compromiso general.
• Tablones de anuncios: el sistema de colaboración Move & Meet de Nobo cuenta con una superficie de tablón de anuncios para exponer investigaciones y datos en grupos más pequeños.
• Pizarra móvil o pizarra de conferencia móvil: herramientas versátiles para que los presentadores ilustren conceptos, aporten ideas o entablen debates improvisados con los asistentes.
• Carteles y pancartas: proporcionan a los asistentes información esencial y crean un ambiente cohesionado y profesional.

Con las herramientas adecuadas puedes crear un simposio bien organizado y atractivo que fomente la colaboración, el intercambio de conocimientos y una experiencia positiva para los asistentes. No olvides tener en cuenta la logística, los requisitos del lugar de celebración y las necesidades específicas de la franja horaria de tu simposio a la hora de decidir qué herramientas utilizar.

¿Qué es un seminario?

Los seminarios suelen considerarse una herramienta didáctica en la enseñanza superior. Sin embargo, ¿sabías que los seminarios también se utilizan en el mundo laboral? En un entorno profesional, un seminario se utiliza para ofrecer una formación estructurada a los empleados. Están diseñados para mejorar los conocimientos, habilidades y competencias relacionados con un tema concreto relevante para el trabajo o el desarrollo profesional de los asistentes.

Resumen del formato del seminario

El formato de un seminario puede variar en función de los objetivos específicos, la duración y la audiencia de la reunión. No obstante, a grandes rasgos se procederá de la siguiente manera:

• Introducción al seminario
• Presentaciones
• Sesiones interactivas
• Ejercicios prácticos o talleres
• Resumen y comentarios finales

Los seminarios suelen ofrecer la oportunidad de obtener certificaciones o desarrollo profesional, lo que permite a los asistentes cumplir sus requisitos de formación continua o demostrar su compromiso con el aprendizaje permanente y la mejora de las competencias.

Su duración puede variar desde unas horas hasta varios días. Los seminarios suelen ser resumidos e intensivos, con el objetivo de ofrecer una cantidad significativa de información y conocimientos prácticos en un plazo relativamente breve.

Las mejores herramientas para celebrar un seminario

Dada la naturaleza más íntima de un seminario (o espacio para seminarios), hay una serie de herramientas que pueden ser útiles para organizar y mejorar la experiencia de los asistentes. Si vas a realizar una presentación, un taller o una tarea interactiva como parte de un seminario, puedes considerar la posibilidad de utilizar:

• Un proyector y una pantalla: esenciales para mostrar presentaciones, vídeos u otros contenidos visuales si tienes un público numeroso.
• Micrófono y sistema de sonido: en función del tamaño de tu espacio para seminarios y de la actividad, debes garantizar una comunicación clara y audible.
• Pizarra y rotuladores: se utilizan para ayudas visuales, ilustrar conceptos o facilitar debates improvisados o sesiones de lluvia de ideas.
• Puntero láser: práctico si quieres resaltar puntos o detalles específicos en diapositivas o ayudas visuales durante tu presentación.
• Temporizador o cronómetro: te ayuda a gestionar eficazmente el tiempo de tu presentación o tarea y a no sobrepasar los límites de tiempo asignados.
• Bloc de rotafolios y pizarra de conferencia  - un medio visual adicional para que los presentadores escriban o dibujen ideas, diagramas o puntos clave durante el seminario.
• Folletos y material impreso: perfectos para que los asistentes se los lleven para leerlos después del seminario.

Diferencias clave entre simposios y seminarios

La principal diferencia entre un simposio y un seminario radica en su objetivo general, formato y alcance. He aquí las principales diferencias:

Propósito

Un simposio reúne a expertos para presentar y debatir un tema específico. Hace hincapié en el intercambio de conocimientos, resultados de investigación y perspectivas entre los participantes.

En cambio, un seminario es más específico e interactivo y suele utilizarse para la formación o el desarrollo profesional. Fomentan el desarrollo de habilidades, la transferencia de conocimientos y el compromiso activo entre un grupo más reducido de participantes.

Formato

Los simposios suelen constar de una serie de presentaciones, mesas redondas y reuniones de trabajo. Pueden abarcar varias sesiones o días, lo que permite a los participantes asistir a las sesiones que coincidan con sus intereses.

Los seminarios suelen consistir en una única sesión o en una serie de reuniones estrechamente relacionadas, a menudo en grupos más reducidos. Dan prioridad a la interacción, la participación activa y el compromiso entre los asistentes. Los seminarios suelen incluir debates, sesiones de preguntas y respuestas y ejercicios prácticos.

Experiencia

Los simposios suelen destacar por su carácter integrador. Las empresas suelen invitar a todos los empleados a simposios internos, ya que fomentan el diálogo interdisciplinar y la colaboración entre expertos y profesionales. No importa si eres nuevo en tu puesto o un experto, todo el mundo es bienvenido.

Por otro lado, los seminarios están estructurados para adaptarse a un nivel de conocimientos específico. Puede tratarse de principiantes, alumnos de nivel intermedio o profesionales avanzados, a los que se impartirá una educación y formación adaptadas a sus necesidades específicas.

Alcance

Los simposios, aunque sin duda tienen un tema central, atraen a un público más diverso. Por lo general, se trata una amplia gama de temas relacionados con el tema general.

Como los seminarios se dirigen a un nivel específico de conocimientos, la gama de temas suele ser mucho más reducida.

En general, los simposios se centran en el intercambio de conocimientos y el debate exhaustivo sobre un tema específico, mientras que los seminarios son reuniones más íntimas diseñadas para el desarrollo de habilidades y el desarrollo personal específico. Los simposios son una solución para perspectivas más amplias, mientras que los seminarios son más adecuados para entornos de aprendizaje en los que se requiere la interacción entre los participantes.